Lunes, 03 Agosto 2020 15:51

Una gestora en las primeras décadas de la Institución Teresiana

NOVEDAD EDITORIAL

Dentro de la colección “Mujeres en la Historia” de la editorial Narcea, que presenta la vida de mujeres del siglo XX que vivieron su vocación educativa como medio de transformación de la sociedad, se acaba de publicar la biografía de Isabel del Castillo Arista.

cnsuprimaNacida en Linares en 1890, murió en Madrid en 1932. Fue, con su prima Antonia López Arista, de las primeras mujeres que entendieron y secundaron las ideas de Pedro Poveda para poner en marcha la Institución Teresiana.

Graduada con éxito en la Escuela Superior de Magisterio, formó parte del primer Consejo de la IT y fue vicedirectora y administradora general. En 1923 formaba parte del grupo que viajó a Roma a presentar la Institución para su aprobación pontificia.

Conservar la memoria

La lectura de este libro despierta, en primer lugar, un profundo agradecimiento, porque contribuye a conservar la memoria de Isabel (como lo fue la biografía de Antonia López Arista); es un acto de justicia de la Institución Teresiana y, al mismo tiempo, porque supone acompañar los orígenes de la Institución. En él se revela la grandeza de la persona biografiada. Una mujer capaz e inteligente, generosa y entregada, incondicional y disponible, sencilla y práctica, académicamente brillante y fiel a la amistad sin defraudar nunca la confianza que en ella depositaban.

Se trata de una biografía imbricada en el escenario de la Institución Teresiana, contribuyendo a ampliar su conocimiento: sus orígenes, su carisma e identidad, sin descartar que la protagonista ofrece un testimonio femenino de una forma de ser y estar en el mundo.

Los títulos –oportunos y apropiados– de los capítulos van determinando no solo las etapas de la vida de Isabel en el marco de la IT, sino las actitudes que se derivan de “saber estar” con hechos y compromisos concretos; el testimonio de educadora que trasmite el “por qué de todo”; que está en la brecha “discreta y eficaz”; que da testimonio de un talante de servicio “de la mañana a la noche”; que hace posible la Obra teresiana en relación continua con el Fundador y con Josefa Segovia, desde una “hermandad espiritual” vivida, “sin hacer sombra a nadie”.

Gestora e impulsora

Una Institución no solo se hace y consolida con la idea fundante, sino con la puesta en práctica que la hace posible. De Isabel y de Antonia -afirma Poveda- “pertenecen a la Obra desde su fundación”. Y a Isabel le corresponde asumir la infraestructura de todo: compras, gestiones jurídicas, acuerdos con entidades públicas y privadas, actualizarse en leyes y normativas, relacionadas con la administración y la legislación que emana el Gobierno. Para Poveda, en particular, supone descargar sobre ella todos esos aspectos, así como otros de la vida cotidiana, con la seguridad de que se harán bien y según su pensar. Para Josefa Segovia, como directora general, es la retaguardia necesaria para llegar a todas las demandas de las fundaciones que se están poniendo en marcha y donde ella no puede llegar.toledo

El desplazamiento continuo de Isabel a los lugares donde se necesita afianzar la Obra, espiritual o materialmente, no corta el ritmo a su capacitación profesional que la acredita también para impulsar la cultura y los desafíos de la ciencia, como intelectual y como mujer. Aunque vierta toda su titulación al servicio de la IT. La Publicación del Boletín es un claro ejemplo.

Desde el punto de vista metodológico, la autora recurre a testimonios de terceros, personas que la vieron actuar, que recibieron sus consejos, que fueron discípulas y compañeras al mismo tiempo.

Biografía, en la que los hechos y los atributos de la protagonista están documentados, revelando un trabajo serio de investigación que acerca autora y protagonista, creando una sinergia a la que convida al lector.

No se trata de un libro de divulgación, de entretenimiento. Parece destinado a quien tiene algún conocimiento de la Institución Teresiana o al estudioso que busque conocer experiencias y alternativas educativo-culturales en la primera mitad del siglo XX en España, por el contexto político-social en el que se presenta. Es un testimonio de la presencia de la mujer, ocupando un lugar de liderazgo sin ostentación, en la sociedad de su tiempo.

La Antología de Escritos que se ofrecen como colofón, brinda la oportunidad de acercarnos directamente a la protagonista. En los breves apuntes de espiritualidad: contundentes. La selección de cartas, manifiestan el afecto, la amistad y el conocimiento singular de cada persona, dando aliento o corrigiendo con libertad y amor. Nos hablan de una actividad desbordante en la que articula y organiza trabajos y proyectos que ponen a prueba su “clara inteligencia y talento práctico”. El Diario de Roma: narrativa fluida, jugosa, espontánea y simpática. Narrativa que nos permite exclamar: ¡Que movilidad! ¡Que atrevidas! ¡Qué optimistas! ¡Qué ajetreo! ¡Que providenciales amistades conquistan! Exclamaciones que sirven también para aplicar a la vida toda de Isabel.

Mª Guadalupe Pedrero Sánchez

Ficha del libro:
Título: Isabel del Castillo Arista. El don de saber estar.
Autora: Mª Encarnación González Rodríguez
1ª ed. 30/05/2020
ISBN:8427727461 ISBN-13:9788427727465
Narcea, Madrid